Actualización En La Ley De Lesiones Recreacionales

Cuando una persona que participa en una actividad recreativa es lesionada debido a la conducta descuidada o negligente de otra persona, el sentido común parecerá dictar que la persona lesionada deberá ser compensada por sus lesiones y daños causados por el malhechor. Desafortunadamente, bajo la ley de California esta regla está muy lejos de ser clara–y recientemente ha crecido notablemente desfavorable a las víctimas lesionadas en el contexto recreativo. La mayoría de las veces, aún los malhechores más descuidados son capaces de argumentar que sus víctimas “asumieron el riesgo” de que este daño pudiera ocurrir -dejando que aún las personas catastróficamente lesionadas queden totalmente sin compensación por sus gastos médicos y pérdida de ingreso.

Desconocido para la mayoría de los consumidores en California, en la década de los 90 se marcó el desarrollo de cambios significativamente desfavorables en la doctrina de “asunción de riesgos en California”. Como tal, los abogados defensores contratados por las compañías de seguros a menudo argumentan que las víctimas lesionadas han “asumido el riesgo” de los “daños inherentes” de la actividad recreativa en la cual han participado–aun y cuando un el malhechor se ha comportado de manera inusualmente descuidada o de una manera que podría previsiblemente causar daño a otros.

Así, por ejemplo, la Corte Suprema de California en sostuvo que un conductor de barco que arrastró negligentemente a un esquiador muy cerca de la orilla del agua no era responsable por las lesiones causadas cuando el esquiador fue golpeado por las ramas bajas de un árbol. Otra corte sostuvo que un conductor negligente de un vehículo para carreras en las dunas no fue responsable por lesiones catastróficas causadas a un motociclista en una colisión fuera del camino aun cuando el motociclista y el conductor del vehículo de dunas eran extraños entre sí, y el conducto torpe dicho vehículo no utilizó señalamientos o banderas. En estos casos, las cortes sostuvieron que uno “asume el riesgo” inherente a una actividad deportiva y que los “co-participantes” por lo mismo no tienen el deber de ser razonablemente cuidadosos con los demás.

Estos casos dejaron las víctimas de la tragedia financiera y emocionalmente arruinados–a pesar de que sus lesiones y daños fueron claramente causados por la conducta descuidada que podría previsiblemente resultar en daño a otras personas. Mientras existen ciertas excepciones a la regla, como resultado de estas decisiones, vemos como aumenta el número de abogados defensores y compañías de seguros que utilizan la doctrina de “asunción de riesgo” en sus casos de clara negligencia, donde esta defensa no se ha aplicado nunca previamente. Por ejemplo, estamos actualmente litigando en caso de 1 caballo Centro ecuestre se “asusto” debido a la presencia de algunos perros (a pesar de la regla específica que menciona que tuvo los perros deben de permanecer en un plazo corto en las premisas–una regla designada específicamente para que los caballos no se asusten de los perros corriendo y ladrando en proximidad cercana a los jinetes). El jinete inexperto, que estaba tomando una lección, fue tirado del caballo y lesionados severamente. El abogado defensor de la compañía de seguros del propietario del dueño está buscando que el caso sea descartado, argumentando que el jinete “asumió el riesgo” de caerse del caballo al participar en la actividad en el primer lugar. Nosotros argumentamos, entre otras cosas, que es absurdo el declarar que nuestro cliente “asumió un riesgo” de que su caballo sería asustado por perros sin control, puesto que los perros sin correa están específicamente prohibidos de estar presentes en esta área. Mientras que parecería que deberemos tener éxito en este caso, al momento de imprimir este documento, la moción del defendido para descartar el caso aún estaba pendiente.

El manejo de cualquier caso involucrando lesiones durante la participación en una actividad recreativa ahora, más que nunca, presenta asuntos legales extremadamente complejos de los cuales el consumidor promedio en California está completamente desprevenido. Aitken*Aitken*Cohn es más que capaz de invertir los mejores argumentos legales y de hechos para ayudar a sus clientes a navegar a través de esta mina legal.